El alcalde, casi, se queda solo

Una vez más hemos tenido unas fiestas del Suceso que han transcurrido tranquilamente sin incidencias que reseñar y de ello nos congratulamos todos los carranzanos.

Afortunadamente no se cumplió la amenaza que leí en Facebook a algún colectivo antitaurino ajeno a Carranza en la que se amenazaba con organizar una concentración de protesta a resultas de la pasada consulta de los toros. Algo hemos avanzado.

Ahora bien, siendo esto así quisiera compartir con mis lectores una de las cosas curiosas de las que fuí testigo durante la celebración de la novillada celebrada por la tarde.




La novillada siempre suele estar presidida por el alcalde y la corporación en pleno. Uno ya intuía que vista la postura, legítima por otra parte, de los concejales de Karrantza Zabala de posicionarse en contra de los toros también se abstendrían de asistir a la novillada desde el palco de autoridades tal y como sucedió. Del alcalde tampoco esperaba menos si tenemos en cuenta que le gusta el grupo de Facebook "Para que en Euskal Herria también se prohíban las corridas de toros", dicho sea de paso.

Evidentemente, la deserción de sus concejales colocaba a Raúl Palacio en una posición incómoda: Ya se veía presidiendo la novillada en solitario desde el palco de autoridades. Glups. Algo había que hacer y tan pronto como vislumbró la testa canosa de Txema Martín (para quien no lo sepa, anterior alcalde de Carranza por el PNV y desbancado de la alcaldía por una moción de censura del partido de Raúl Palacio), acudió raudo y veloz a invitarle a que le acompañara al palco de autoridades. Evidentemente Txema le dijo que no. Algo de dignidad todavía queda.

Algo había que hacer. Raúl Palacio no podía permitir que semejante marronazo cayera exclusivamente sobre su cabeza. Es pues que ver aparecer a Jose Luis Portillo, alcalde por el PNV en las dos legislaturas anteriores, e invitarle al palco fué todo uno.

Ello dio lugar a que los asistentes fueramos testigos de una estampa grotesca al tener Raúl Palacio la desfachatez de invitar al palco de autoridades al mismo alcalde al que él mismo había interpuesto una querella criminal en 2009 a cuenta de la calidad del agua que consumimos los carranzanos.

Para los que no están puestos en derecho penal recordemos que al interponer en 2009 una querella criminal, Karrantza Zabala y Raúl Palacio querían ver entre rejas al entonces alcalde Jose Luis Portillo. Y en su momento no les tembló el pulso un segundo en poner en marcha la maquinaria legal para que así fuera.

Maquinaria propagandística que tampoco tuvieron escrúpulos en poner en marcha a los cuatro vientos para dar a conocer al mundo mundial las supuestas actitudes negligentes y criminales del entonces alcalde Jose Luis Portillo respecto a la calidad del agua carranzana. Reportaje en Euskadi Directo, artículos en prensa... todo valía con tal de hundir a Jose Luis Portillo.

No quisiera minusvalorar las incomodidades, me consta que ciertas, que muchos carranzanos sufrimos en su momento a cuenta de la calidad del agua que se nos suministraba, pero de ahí a querer ver enchironado al alcalde va un trecho.

Afortunadamente, las consecuencias penales para Jose Luis Portillo y los responsables del Gobierno Vasco denunciados, consejero de Sanidad Gabriel Inclán y el responsable de los Agencia vasca del Agua, Tomás Epalza, quedaron en nada y los tribunales pusieron a Karrantza Zabala y Raúl Palacio en su lugar. Si es que, algunos tenemos memoria y Google todavía más.

Una vez más, quienes asistimos a la novillada fuimos testigos de otro ejemplo de no asunción de responsabilidades de nuestro actual alcalde cuando no JETA directamente, algo que por habitual empieza a dejar de sorprender.